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El aprendizaje de Fifi
El despertar de Fifi fue doloroso, su esposa y su hija empezaron azotarle en el culo y en el pene respectivamente. Luego le desataron, quitaron la bola de la boca y le indicaron que debía subir al piso de arriba.
Arriba le enseñaron su nuevo cuarto el cual incluía un cuarto de baño. Le mandaron desvestirse totalmente, se quitó el tampón que estaba ensangrentado de sangre de su primera regla y luego se dirigieron al cuarto de baño. Se metió en la bañera para que se diera una buen baño con burbujas y sales aromatizadas, puesto que le dijeron que siempre debería estar bien aseada y oler bien. Cuando terminó de darse el baño, le esperaba la tarea de depilarse.
Fifi se puso una bata de estilo japonés ante la indicación de su mujer, y luego le mostraron donde tenía la ropa que debía de usar a partir de ese día. La ropa íntima en la cómoda, encima de esta estaba el set de maquillaje y dos pelucas colocadas, sus vestidos en el armario y los zapatos en el mueble-zapatero.
Todas las mañanas deberás asearte, depilarte y ponerte una bata antes que entre tu hija que te indicará que ropa y maquillaje deberás tener para ese día. No hablaras a no ser que se te indique, y por supuesto deberás terminar tus frases con la palabra señora, y con la mirada hacia abajo, nunca mirándonos directamente a los ojos, dijo su esposa.
En ese instante su hija le indicó la ropa que debía ponerse: corsé con liguero incluido y braguitas de color rosáceo, unos grandes senos postizos, medias blancas, vestido negro de estilo criada francesa y zapatos de tacón de aguja blancos. Contestó Fifi: Si Señora, con la mirada baja, y empezó a vestirse. Su hija le ayudó a apretarle el corsé, y cuando iba a ponerse las braguitas su esposa le indicó que esperara.
Se me olvidaba, en todo momento, día y noche, deberás tener metido en tu culito un aparato como este. Tienes recambios en uno de los cajones de la cómoda. Ahora acercarte para que te explique como se coloca. Se acercó a su esposa y vio como era ese dispositivo: un pequeño consolador que del extremo de la base salían dos gomas elásticas que se enganchaban cada una a un testículo. Lo cogió de las manos de su esposa y se lo introdujo en el culo y se enganchó las gomas en cada uno de los testículos. Su mujer conectó el interruptor que se encontraba en la base del consolador y dijo:
La misión de este dispositivo es que tu culo este dilatado y engrasado para que te den por culo en cualquier momento, para ello cada cierto tiempo del dispositivo, además de vibrar como habrás notado, sale un liquido lubricador.
Fifi terminó de vestirse, y a indicación de su hija se sentó junto a la cómoda, casi se cae al no estar acostumbrado a andar con zapatos de tacón.
Fifi hoy deberás aprender a maquillarte como cualquier mujer, dijo su hija.
Primero Fifi empezó por la cara, tras varios intentos infructuosos quedó decentemente maquillada, cada vez que se equivocaba o lo hacía mal era recompensada con varios fustazos y obligada a desmaquillarse como había aprendido la noche anterior para empezar de nuevo. Luego siguió pintándose las uñas de las manos. Cuando se secaron le indicaron que se quitara los zapatos y las medias para que se pintase las uñas de los pies. Cuando se secaron se puso de nuevo las medias y los zapatos, entonces se aplicó un fijador en la cabeza para que no moviera la peluca.
Bueno, ya pareces una mujercita, ahora debes comportarte como tal. Levantante y ponte un libro sobre la cabeza saldremos al pasillo para que aprendas a andar como una mujer. Se puso Fifi de pie y salió al pasillo. Se colocó un libro encima de la cabeza y empezó a andar como le mostraba su hija.
Durante una hora y media estuvo practicando hasta que cogió cierta soltura. Cada vez que tropezaba o se le caía el libro recibía varios fustazos por parte de sus amas. Luego le tocó subir y bajar la escalera. Cuando terminó este entrenamiento tuvo que ir a cambiarse las medias y adecentarse, ya que estaban rotas de las caídas que había tenido y los fustazos que recibió por ser torpe.
Cuando volvió le tenían una sorpresa, unos pendientes con la forma de la palabra Fifi y dos anillas para sus pezones. La ama le perforó las orejas y Fifi se colocó sus pendientes, luego se subió el vestido, su hija le quitó los pezones postizos para que su esposa pudieran perforar sus pezones y colocarle las anillas. Terminado esta operación le colocaron de nuevo los senos y se adecentó el vestido.
Su esposa le dio una hoja con sus tareas diarias y hobbies:
TAREAS DIARIAS
Como eran mediodía, se fue con su hija para preparar la comida. Después de servir y limpiar la casa y la peluquería, se recogió en su habitación, era festivo y no abrían la peluquería, y empezó a ver un video para hablar de forma femenina. Cuando llegó la noche siguió con sus tareas: preparar la cena, servirla y fregar. Luego satisfacció sexualmente a sus amas: fue violada como la noche anterior.
Se fue a acostar, se desvistió, se puso un nuevo consolador en el culo y se puso un camisón para después desmaquillarse. Mañana sería un día duro, iba a trabajar ayudando a sus amas en la peluquería.
Arriba le enseñaron su nuevo cuarto el cual incluía un cuarto de baño. Le mandaron desvestirse totalmente, se quitó el tampón que estaba ensangrentado de sangre de su primera regla y luego se dirigieron al cuarto de baño. Se metió en la bañera para que se diera una buen baño con burbujas y sales aromatizadas, puesto que le dijeron que siempre debería estar bien aseada y oler bien. Cuando terminó de darse el baño, le esperaba la tarea de depilarse.
Fifi se puso una bata de estilo japonés ante la indicación de su mujer, y luego le mostraron donde tenía la ropa que debía de usar a partir de ese día. La ropa íntima en la cómoda, encima de esta estaba el set de maquillaje y dos pelucas colocadas, sus vestidos en el armario y los zapatos en el mueble-zapatero.
Todas las mañanas deberás asearte, depilarte y ponerte una bata antes que entre tu hija que te indicará que ropa y maquillaje deberás tener para ese día. No hablaras a no ser que se te indique, y por supuesto deberás terminar tus frases con la palabra señora, y con la mirada hacia abajo, nunca mirándonos directamente a los ojos, dijo su esposa.
En ese instante su hija le indicó la ropa que debía ponerse: corsé con liguero incluido y braguitas de color rosáceo, unos grandes senos postizos, medias blancas, vestido negro de estilo criada francesa y zapatos de tacón de aguja blancos. Contestó Fifi: Si Señora, con la mirada baja, y empezó a vestirse. Su hija le ayudó a apretarle el corsé, y cuando iba a ponerse las braguitas su esposa le indicó que esperara.
Se me olvidaba, en todo momento, día y noche, deberás tener metido en tu culito un aparato como este. Tienes recambios en uno de los cajones de la cómoda. Ahora acercarte para que te explique como se coloca. Se acercó a su esposa y vio como era ese dispositivo: un pequeño consolador que del extremo de la base salían dos gomas elásticas que se enganchaban cada una a un testículo. Lo cogió de las manos de su esposa y se lo introdujo en el culo y se enganchó las gomas en cada uno de los testículos. Su mujer conectó el interruptor que se encontraba en la base del consolador y dijo:
La misión de este dispositivo es que tu culo este dilatado y engrasado para que te den por culo en cualquier momento, para ello cada cierto tiempo del dispositivo, además de vibrar como habrás notado, sale un liquido lubricador.
Fifi terminó de vestirse, y a indicación de su hija se sentó junto a la cómoda, casi se cae al no estar acostumbrado a andar con zapatos de tacón.
Fifi hoy deberás aprender a maquillarte como cualquier mujer, dijo su hija.
Primero Fifi empezó por la cara, tras varios intentos infructuosos quedó decentemente maquillada, cada vez que se equivocaba o lo hacía mal era recompensada con varios fustazos y obligada a desmaquillarse como había aprendido la noche anterior para empezar de nuevo. Luego siguió pintándose las uñas de las manos. Cuando se secaron le indicaron que se quitara los zapatos y las medias para que se pintase las uñas de los pies. Cuando se secaron se puso de nuevo las medias y los zapatos, entonces se aplicó un fijador en la cabeza para que no moviera la peluca.
Bueno, ya pareces una mujercita, ahora debes comportarte como tal. Levantante y ponte un libro sobre la cabeza saldremos al pasillo para que aprendas a andar como una mujer. Se puso Fifi de pie y salió al pasillo. Se colocó un libro encima de la cabeza y empezó a andar como le mostraba su hija.
Durante una hora y media estuvo practicando hasta que cogió cierta soltura. Cada vez que tropezaba o se le caía el libro recibía varios fustazos por parte de sus amas. Luego le tocó subir y bajar la escalera. Cuando terminó este entrenamiento tuvo que ir a cambiarse las medias y adecentarse, ya que estaban rotas de las caídas que había tenido y los fustazos que recibió por ser torpe.
Cuando volvió le tenían una sorpresa, unos pendientes con la forma de la palabra Fifi y dos anillas para sus pezones. La ama le perforó las orejas y Fifi se colocó sus pendientes, luego se subió el vestido, su hija le quitó los pezones postizos para que su esposa pudieran perforar sus pezones y colocarle las anillas. Terminado esta operación le colocaron de nuevo los senos y se adecentó el vestido.
Su esposa le dio una hoja con sus tareas diarias y hobbies:
TAREAS DIARIAS
- Levantarse a las 7:00 AM
- Lavarse y depilarse
- Aplicarse el tratamiento de feminización
- Vestirse y maquillarse según la preferencia de sus amas
- Preparar el desayuno, servirlo y luego fregar lo ensuciado
- Limpieza de la casa y la peluquería
- Ayudar en la peluquería
- Preparar la comida, servirla y fregar
- Limpiar la casa y la peluquería de nuevo hasta las 17:30
- Ayudar en la peluquería
- Limpieza de la peluquería
- Preparar la cena, servirla y fregar
- Satisfacer sexualmente en lo que le ordenen
- Acostarse
- Leer y ver videos para mejorar su aspecto y educación femenina
Como eran mediodía, se fue con su hija para preparar la comida. Después de servir y limpiar la casa y la peluquería, se recogió en su habitación, era festivo y no abrían la peluquería, y empezó a ver un video para hablar de forma femenina. Cuando llegó la noche siguió con sus tareas: preparar la cena, servirla y fregar. Luego satisfacció sexualmente a sus amas: fue violada como la noche anterior.
Se fue a acostar, se desvistió, se puso un nuevo consolador en el culo y se puso un camisón para después desmaquillarse. Mañana sería un día duro, iba a trabajar ayudando a sus amas en la peluquería.
El criada sumisa.
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